En la localidad argentina de Sierras Bayas, entre los años 20 y 30 del siglo XX, llegaron 60 inmigrantes que trajeron a sus familias, las formaron y se integraron a la comunidad serrana, llegando a ser hasta 200 integrantes. En esa época, Checoslovaquia era una sola nación y así los inmigrantes y sus descendientes continúan identificándose como checoslovacos aunque sepan de ser checos, eslovacos o moravos. El 27 de diciembre del año pasado la comunidad checoslovaca sierrabayense vivió un reverdecer con la reparación del Monumento de la colectividad levantado en 1970 y realizado por el escultor Milan Dobeš, y al mismo tiempo los presentes rindieron homenaje a dos inmigrantes de la primera ola que aún están vivos: Juan Trnavsky y Esteban Simkovic. Debo destacar que la atmosfera de aquel evento la podemos compartir gracias al DVD grabado por nuestro oyente, descendiente de eslovacos Raúl Černák. En la introducción hemos escuchado la voz de la señora Jenny Zamora, ahora nos hablará la señora Silvia Laska Černák.
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En el acto de homenaje se entrelazaban los recuerdos y conmemoraciones con las emociones y canciones. Las canciones eslovacas han sido presentadas por la señora Nelly Nuñuk.
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Con el cursar de los años el Monumento levantado en 1970 como agradecimiento a la tierra argentina por haber recibido a los inmigrantes checoslovacos empezó a sentir las huellas del tiempo y necesitaba ser restaurado. Así pues, la colectividad checoslovaca de Sierras Bayas empezó a proyectar tareas de restauración y mantenimiento. Para ello contó con el gran apoyo de la empresa Cidegas - de capital checo y con una planta fabril en el Parque Industrial Olavarría - y, en especial, de su gerente Zdenek Sykora, quienes realizaron los trabajos de manera desinteresada, a través de un sierrabayense integrante de la empresa, Javier Biagini. Vamos a oír la voz de la señora Mirta Belusky.
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Nuestro reportaje indirecto, lo vamos a terminar contándoles una breve historia personal. Melisa Sottile, una sierrabayense cuya abuela era eslovaca y vivió en la localidad serrana, habló de su viaje realizado a la tierra de sus antepasados. La abuela de Melisa se llamaba Isabel Illas, en eslovaco Alžbeta, más conocida como Beta. Melisa decidió estudiar ruso en 2011 y tenía el sueño de practicarlo en Rusia. Así pues, en 2014 emprendió un viaje de 70 días por países de Europa del Este. Ese viaje fue tan improvisado que Melisa no esperaba realmente poder conocer a sus parientes eslovacos. No tenía prácticamente datos sobre ellos.
Colectividad Checoslovaca de Sierras Bayas
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