Recientemente apareció la noticia de que en un bosque de la región de Orava un oso pardo atacó a un cazador. El hombre sufrió varias lesiones graves y terminó en el hospital local. Los habitantes y los visitantes de la zona norteña del país deberían estar más atentos y tener más cuidado porque los osos pardos, antes de entrar en la fase de la hibernación necesitan nutrirse bien y por eso están buscando la comida. En consecuencia bajan a las poblaciones donde los atraen los avances de la comida en los contenedores de inmundicia. Para monitorear el movimiento y el comportamiento de los osos pardos los cazadores instalaron en las periferias de varios pueblos y ciudades las llamadas foto trampas que deberían disuadir a los osos hambrientos de acercarse a las casas.
También cerca del pueblo de Podolinec han sido avistados varios osos pardos acercándose a las casas de la gente. Habla un habitante del pueblo.
Me encontraba en un prado, cerca del bosque. Delante de mí, a unos 20 metros de distancia estaba mi colega y, a uno 50 metros, había un oso pardo erguido. Yo observaba como se miraban los dos.
Las fotos sacadas por las llamadas fototrampas documentan que los osos suelen acercarse a las casas sobre todo durante las horas nocturnas. Peter Szentivany, cazador.
La mayor frecuencia de movimiento de osos pardos ha sido registrada por las fototrampas instaladas detrás de la cooperativa agrícola y luego en un lugar que está a unos 100 metros de un sendero turístico bastante frecuentado.
En el este del país han sido avistados osos pardos cerca de los pueblos de Toporec, Vyšné Ružbachy y Nižné Ružbachy. Escuchemos a Dezider Kilár, presidente de la Cámara de los cazadores de Stará Ľubovňa.
Este año el número de osos pardos en Eslovaquia es excesivo. En nuestra región suelen aparecer de manera temporal. Son los que viven en los Altos Tatras o en Spiš. Como este año hemos tenido una abundante producción de frutos de bosque, sobre todo de arándanos, los osos pardos, atraídos por estas exquisiteces bajan hasta aquí.
Los cazadores y guardabosques respondieron a la situación difundiendo la información sobre cómo hay que comportarse cuando uno se enfrenta con un oso pardo. Para evitar peligros, la persona debería quedarse tranquila y no entrar en pánico. El oso pardo es un animal huidizo y ataca solo cuando está herido. Continúa Dezider Kilár.
Hay que quedarse tranquilo, no correr, quizás ayuda hablar en voz alta, o incluso gritar. Pero en nuestra región, que yo recuerde, no había habido ningún ataque de oso pardo a personas.
Y el cazador Peter Szentivany añade otra información importante.
Si alguien avistara a un oso pardo que se comportara de manera peligrosa o sospechosa, debe contactar a Protección del medio ambiente, a la Cámara de cazadores, al municipio y al servicio veterinario local.
La caza de oso pardo está prohibida. Las excepciones son autorizadas de parte de la cartera del Medio Ambiente, y esto ocurre solo en caso de que el oso realmente sea una amenaza para la gente. A pesar de la presencia excesiva de esta fiera, este año aún nadie ha solicitado un permiso de caza. El período en el que hay que tener cuidado con los osos pardos termina a mediados del mes de noviembre, luego empieza la temporada de hibernación.
Y ahora les ofrezco un auténtico testimonio de un pastor, un verdadero "bača" eslovaco que se llama Imro y vive en el valle de Jánska dolina.
Nadie nos cree cuando decimos que las fieras se han reproducido de manera excesiva. Cuando uno viene al bosque a dar paseo de vez en cuando, está claro que no puede ver lo que vemos nosotros que vivimos en el bosque como mínimo 7 meses del año.
Han venido 3 lobos, uno de ellos era grande como un ternero, este ya estaba aferrando una oveja con una pata y los otros dos me miraban a mí. La oveja se estaba muriendo. No pude salvarla de ninguna manera. Por supuesto, tenía mucho miedo. Son lobos grandes y fuertes. Son de verdad peligrosos.
Un amigo mío me contó que el año pasado caminaba por un valle rumbo Jamník y se arrepintió de no tener consigo una cámara fotográfica… vio 11 osos pardos en una sola jornada.
Claro, tanto el lobo como el oso pardo, ambos forman parte de nuestra naturaleza, de nuestra montaña. Sin embargo, si hay demasiados tenemos que hacer algo. Recuerdo los tiempos en los que ver a un oso pardo era un fenómeno muy raro. Ya no es así. Ver a un oso es como ver a un perro.
Hay demasiados lobos y demasiados osos pardos. Y quien niega este hecho, miente. A los que protegen tanto a los osos pardos y a los lobos yo les desearía que se encontraran con una de estas fieras… y que se lleven un buen susto.
Osos pardos en las poblaciones
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