Hoy, 4 de abril, se conmemoran 73 años de la liberación de Bratislava de la ocupación nazi. Aproximadamente 742 soldados soviéticos, 470 alemanes y húngaros y 121 civiles murieron en los combates por la conquista de Bratislava.
A finales de marzo de 1945, los paramilitares ultraderechistas de la Guardia de Hlinka y del Partido Popular Eslovaco prácticamente habían abandonado la ciudad. A diferencia del presidente Jozef Tiso, los miembros del gobierno y los altos funcionarios de la Guardia de Hlinka, que el 1 de abril se trasladaron a Holice, el gobierno local casi en su totalidad se mantuvo en la ciudad.
En los primeros días de abril, las oficinas y fábricas paralizaron toda su actividad, el transporte público dejó de funcionar y la ciudad se quedó sin electricidad y gas. Las tropas nazis destruyeron las principales fábricas de Bratislava, el puente sobre el río Danubio y quemaron varios edificios administrativos. Los alemanes, aunque sabían que estaban obligados a retirarse, no querían entregar la capital eslovaca sin combatir.
Para la defensa de la ciudad, además de varias unidades militares alemanas y un pequeño grupo de paramilitares de la Guardia y los Departamentos de Emergencia de Hlinka, fueron movilizados los llamados batallones de fortificación de la Luftwaffe.
La batalla directa por la ciudad comenzó el 2 de abril de 1945, cuando las unidades de las tropas soviéticas del segundo frente ucraniano liberaron la localidad de Vajnory. Al día siguiente, se produjo la principal ofensiva del Ejército Rojo. En las primeras horas del día, después de un breve ataque aéreo y del fuego de los lanzacohetes Katiusha y la artillería, entraron en acción las tropas de infantería.
En la mañana del 4 de abril de 1945, la infantería soviética, respaldada por la vigésimo séptima brigada y el segundo regimiento de tanques rumano y por la flotilla del Danubio del Ejército soviético, atacó a los alemanes. El Ejército nazi fue obligado a retroceder. En horas de la tarde, los soldados del Ejército Rojo llegaron hasta el límite oeste de la ciudad, expulsando totalmente a las tropas alemanas. Los últimos combates tuvieron lugar el 4 de abril de 1945 en horas de la noche.
Atendiendo a su singular ubicación, Bratislava fue una de las últimas ciudades eslovacas liberadas.
