Reacciones a la dimisión del ministro del Interior, Tomáš Drucker

Reacciones a la dimisión del ministro del Interior, Tomáš Drucker

El ministro del Interior eslovaco, Tomáš Drucker dio a conocer en rueda de prensa, celebrada a primeras horas de la tarde de ayer, su decisión de renunciar a su puesto en el gobierno. Según las palabras pronunciadas en el momento de anunciar su dimisión, la destitución -que de él se solicitaba- del presidente del Cuerpo de Policía, Tibor Gašpar, no sería ni correcta ni justa. "Se me ha pedido que intente poner fin a la polarización de la sociedad destituyendo a Tibor Gašpar, pero quiero preservar mi integridad. Si tengo el convencimiento de que esa destitución es incorrecta y, en lugar de rebajar la tensión, ésta aumenta todavía más, creo que no tengo derecho a mantenerme en el puesto de ministro del Interior. Es por ello que he decidido presentar al Presidente mi dimisión de esta función", anunciaba Drucker. Por ello, su dimisión ha resultado sorprendente para el resto de sujetos de la política eslovaca. De esta manera, el politólogo Juraj Marušiak se mostraba sorprendido por la misma, a pesar de que reconocía que se habían juntado diversos temas, desde su situación personal sanitaria, hasta acusaciones contra su persona en el ámbito empresarial. "Desconozco cuál es la razón para su dimisión" afirmaba Marušiak, "de todas maneras, no entiendo por qué no ha querido destituir a Gašpar". Con todo, reconocía que después de todas las presiones recibidas, "su continuación en el Gobierno era muy complicada". También la politóloga Darina Malová piensa que el gesto de Drucker es una muestra de que tira la toalla, lo que seguramente, afirmaba, representa el final de su carrera política. Por otra parte, el también politólogo Pavol Baboš percibe la argumentación de Drucker para su dimisión como "inconsistente". Baboš afirma que Drucker demuestra con ello que "no tiene sensibilidad hacia la responsabilidad política" en el sentido, afirmaba, "de que no se le pedía cesar a Gašpar por haber errado en el pasado, sino porque una parte de la sociedad no confiaba en él, y si como ministro quería volver a obtener esa confianza o no". También entre los políticos eslovacos se han producido diversas reacciones ante la dimisión de Drucker. La primera de ellas llegó de parte del presidente del movimiento opositor OĽaNO, Igor Matovič, que calificó a Drucker de "cobarde y aprovechado". Entre sus compañeros de coalición, tanto Andrej Danko, presidente de SNS y del Parlamento, como su homólogo del partido Most-Híd, Béla Bugár, recibieron con sorpresa su dimisión y afirmaron tomarla en cuenta. También el anterior ministro de Cultura, Marek Maďarič afirmó que "no pensaba que Drucker cesara a Gašpar de su puesto de la Policía", por lo que entiende su dimisión. Por otro lado, el partido opositor y liberal SaS, por boca de su vicepresidente, Ľubomír Gaľko, afirmaba que "en la actual coalición gubernamental no hay quien devuelva la confianza en la policía". Finalmente tanto el premier, Peter Pellegrini, como el presidente Andrej Kiska afirmaron que se expresarían al respecto tras su encuentro con el ministro dimisionario.

Hilari Ruiz de Gauna i Torres Foto: TASR

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