El nuevo presidente de la Policía, recibido con reacciones diversas

El nuevo presidente de la Policía, recibido con reacciones diversas

Desde que fue asesinado el periodista Ján Kuciak y su novia el cuerpo policial eslovaco sigue estando sometido a críticas relacionadas con la investigación del caso. Además, constantemente siguen apareciendo sospechas sobre las conexiones entre la policía, el crimen organizado y algunos políticos. En esta situación el puesto del presidente de la Policía se ha convertido en uno de los más vigilados y la ministra de Interior, Denisa Saková, ha tenido que elegir cuidadosamente al candidato a este cargo. La oposición, varias iniciativas cívicas y el presidente insistieron en buscar a alguien que no estuviera conectado con el ex ministro Robert Kaliňák. Al frente del Cuerpo Policial Eslovaco finalmente ha sido nombrado Milan Lučanský que hasta ahora ocupaba el cargo de jefe de la inspección policial en el ministerio de Interior. Lučanský se ha sometido recientemente al detector de mentiras y a pruebas en las que ha tenido que demostrar su trasfondo económico. "Es doblemente difícil estar al frente de la policía estando bajo enorme presión, tal y como ocurre actualmente. Cuando hay que defenderse a cada paso ante los ataques, es más difícil trabajar tranquilamente, desarrollando actitudes innovadoras", explicaba Lučanský, añadiendo que no teme estos retos: "No tengo temor, ni mala conciencia. Tampoco representa para mí un problema realizar una declaración de patrimonio e intereses". Los representantes de las filas de oposición critican el nombramiento de Lučanský diciendo que tanto Saková como él pertenecen a "la gente del ex ministro Kaliňák", lo cual impide el cambio en la sociedad. "Lučanský, que tiene estrechos contactos con gente sospechosa, no debería ocupar ni el puesto del jefe de la inspección policial", afirma Ľubomír Galko del partido Libertad y Solidaridad (SaS). Este partido ya ha pedido que Lučanský declare públicamente sus bienes. En este sentido se habla sobre su piso en Florida. Boris Kollár del partido Sme rodina (Somos familia) lo considera ridículo, dado que, como dice: "Un piso allí es más barato que en Petržalka. Lo importante es que Lučanský no está interconectado con ninguna oligarquía". Lučanský en el pasado fue noticia por enviar a la cárcel a Mikuláš Černák, uno de los mafiosos eslovacos más peligrosos, así como a los miembros de una banda que disolvía a sus víctimas en ácido. Ahora considera que los retos más importantes con vistas al futuro son la lucha contra el terrorismo y la inmigración.

Mária Mangová Foto: TASR

Živé vysielanie ??:??

Práve vysielame