En la feria de Slovakiatour encontramos al señor Marián Číž, director del museo de la caza en Svätý Anton. Puesto que nos encontramos en pleno e intenso invierno, aprovechamos el momento para preguntarle como cuidan y como ceban a los animales en este periodo.
Como primero hay que destacar dos cosas. La primera es que la caza en Eslovaquia está muy bien desarrollada y la segunda que la caza sobre todo significa cuidar y ayudar a los animales. La misma caza representa solo una parte de todo el proceso esto, es una conclusión de todo el trabajo. Y todo esto en nuestro país, ya desde hace varios decenios, está muy bien organizado. En lo que se refiere al trabajo invernal, eso empieza ya durante el verano, cuando los cazadores controlan sus cotos y luego en otoño hacen trabajos de manutención y arreglan los cebadores. Durante el invierno solo distribuyen el forraje. Y por fin, en primavera hay que limpiar los cebadores. Es decir, el trabajo del cazador nunca se acaba. Cuando el invierno no es demasiado frío y demasiado largo, los animales con buenas condiciones de salud deberían sobrevivir sin problemas. Sin embargo, sabemos que los últimos años están marcados por el recalentamiento global que conlleva fenómenos excepcionales y cambios climáticos. Por eso un cazador debe siempre vigilar para poder intervenir en cualquier momento, sabiendo exactamente en qué periodo y a qué tipo de animal debe ayudar, que tipo de forraje darle y cuanto darle. En el mismo tiempo el cazador tiene que empeñarse en reducir al máximo sus visitas al bosque, dejando en paz a los animales que están en su fase de descanso e hibernación. En nuestros bosques y campos se trata sobre todo de corzos, ciervos, muflones y jabalís, en los campos hay liebres, faisanes etc. La biodiversidad es muy buena y el espectro es muy rico. Hay también varias fieras, pero a esas durante el invierno no le damos a comer, por supuesto.
Creo que igualmente erróneo sería, por ejemplo, darles demasiado forraje a los animales. Podría podrirse o desvalorizarse de otra manera. Todo esto un cazador lo debe saber bien, ¿no?
En Eslovaquia todos los cazadores deben superar un examen muy difícil. Para que luego, cuando entraran en el bosque, no causen daños. Obviamente consideramos muy justo ayudar a los animales durante el invierno, pero también hay que dejar trabajar la misma naturaleza. El invierno es una prueba muy importante para el estado de salud de los animales. Los que están débiles naturalmente llegan a ser una presa para las fieras. El cazador no es el que dirige la naturaleza sino el que le ayuda.
Puesto que en la actualidad nos encontramos en pleno e intenso invierno, ¿cómo cuidan y como ceban los animales en este periodo?
Cuando los animales se encuentran en un buen estado de salud el invierno no debería afectarlos de ninguna manera. Por supuesto, hay algunos casos en los cuales los cazadores deben dedicar una mayor atención a algunas especies. Por ejemplo, cuando la nieve se congela, en los ungulados como corzos y ciervos aparecen más lesiones de las pezuñas y en el mismo tiempo estos animales tienen más dificultad en encontrar un alimento de comer. Como ya he dicho antes en muchos aspectos la naturaleza llega a organizar y solucionar cosas por sí misma. Sin embargo, el cazador debe disponer de buenos conocimientos al respecto para poder intervenir en el momento justo, cuando su intervención resulta ser necesaria e indispensable. La situación en los pájaros es más fácil, puesto que los pájaros que no llegarían a sobrevivir simplemente evitan el invierno migrando hacia al sur. Pero hay algunas especies de animales inmigrados o importados desde Córcega o Cerdeña como son por ejemplo los muflones o los gamos que no tienen predisposiciones genéticas para soportar estos fríos y heladas excesivas. Entonces el cazador debe saber bien qué tipo de animales tiene en su coto y si hay estas especies digamos no autóctonas, se les debe dedicar una atención particular.
Hace algunos días admiré el paisaje invernal conduciendo el coche en la autopista. Y noté que había muchísimas aves de rapiña a lo largo de la autopista. ¿Qué significa este fenómeno tan raro?
Tengo que repetir otra vez que la naturaleza dispone de una buenísima capacidad auto reguladora. Si usted durante estos días ve muchas aves de rapiña a lo largo de la autopista, es porque este año tenemos muchos roedores en los campos que representan la fuente de alimentación para las aves de rapiña, sobre todo para los ratoneros. Además, la naturaleza es tan inteligente y justa que luego en primavera llegara a regular también la demografía, es decir la reproducción de estos pájaros. La gente que estudia estos fenómenos en nivel profesional a menudo se queda muy sorprendida de lo que la naturaleza sabe coordinar.
Me olvidé decir que en algunos lugares también había grupos de cazadores con escopetas y vestidos de trajes típicos. ¿Pasó algo especial, según usted?
Quizás usted ha visto a cazadores que estaban cazando. Según el calendario de caza hasta el 15 de enero está permitido cazar ciervos y ahora aún se pueden cazar también los jabalís.
Cada año en este período solemos informar a nuestros oyentes sobre el aumento del número de los osos pardos en los bosques eslovacos. También aumenta el número de los encuentros de los osos con el hombre y a menudo se pueden ver cerca de los basureros. ¿Nos podría decir usted algo al respecto?
Podemos decir que en Eslovaquia tenemos un exceso de osos. Esta situación podría solucionarse con una caza sistemática. Y por otro lado las actividades humanas están siempre más invadiendo el ambiente forestal, entonces estos ositos no tienen el territorio suficiente para vivir en paz. En consecuencia, aumenta el número de casos cuando esta fiera se encuentra con el hombre. Por eso en algunas regiones está aumentando el miedo de la gente. A menudo también los osos se ven cerca de los basureros buscando la comida. Pero hay que entenderlos, si nosotros hombres estamos reduciendo su espacio y sus posibilidades de alimentación, ellos están constreñidos a buscar soluciones alternativas. Importante es ayudar a la naturaleza corrigiendo su capacidad auto reguladora. Por supuesto, no queremos que el oso pardo llegue a ser una especie amenazada por extinción. Pero en el mismo tiempo tenemos que mantener el ambiente forestal en una situación soportable. Hay que estudiar bien la cantidad de osos que sea óptima por este periodo, que no sean ni demasiado pocos ni demasiado muchos. De eso deben ocuparse los cazadores.
Los cazadores y guardabosques de verdad tienen muchos deberes. También deben proteger a los animales ante la caza furtiva, ¿existe en nuestro país este fenómeno?
Obviamente, desde cuando nació la idea de una caza organizada, correcta y sistemática, naturalmente desde el mismo momento nació la caza furtiva. Lo siento mucho, pero le debo contestar con una óptica realista, que la caza furtiva no desaparecerá. A menudo los mismos cazadores que disponen de una información precisa sobre la presencia de los animales en el coto, cuando no respetan las fechas establecidas, llegan a ser furtivos. O también creció el número de las personas que disponen de armas muy sofisticadas, disponen de coches de todo terreno. Puesto que el ambiente forestal es poco claro y nunca se puede saber cuántas personas son y de que instrumentos disponen. Entonces parar, detener o arrestar a estas personas es muy peligroso. En este caso resulta necesario colaborar con la Policía y también con la cartera de Agricultura.
Claro los tiempos están cambiando y estos criminales también llegaron a ser más equipados, mejor organizados. ¿Había la situación tan peligrosa también en el pasado?
En los tiempos del gobierno de la emperatriz María Teresa había castigos muy interesantes para los cazadores furtivos. Se les ligaban los pies, se les ponían los cuernos en la cabeza y tenían que limpiar las calles barriendo. Esto podría ser también hoy una buena inspiración para crear las medidas de prevención. Está claro que a lo largo de la historia cada tipo de régimen, cada tipo de gobierno, luchaba con este fenómeno empeñándose en reprimirlo. Puesto que en la actualidad se ha creado la cámara de cazadores y también está entrando en vigor la nueva legislación referida a la caza, creo que hay buenas esperanzas para conseguir éxitos.
¿Y cuáles son las especies más amenazadas por los cazadores furtivos?
Los más cazados de manera furtiva lo son los ciervos, corzos, jabalís y muflones. Todos estos animales representan un buen trofeo y una carne muy preciosa.
Es de verdad un paradojo que con el estándar de vida y el bienestar creciente aún existen estos comportamientos tan crueles respecto al medio ambiente. ¿Qué motivos tienen estas personas para cazar de manera clandestina?
Creo que los motivos sean varios. Hay que admitir que en la historia había periodos de pobreza cuando la caza podría ser justificable. Pero en la actualidad creo que nadie lo haga por hambre o por sobrevivir. Es más, una pasión.
Cazadores en invierno_Marián Číž
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