Tras la fundación de Checoslovaquia se crearon varias empresas importantes: oficinas, ministerios, pero también ferrocarriles y navieras estatales. El Danubio era un río estratégico en nuestro territorio que nos conectaba con el mundo. Así que estaba claro que también nacería la Compañía Naviera del Danubio con el nombre en checo y eslovaco de Dunajplavba. Cien años de la existencia de esta compañía con el subtítulo "Historias de barcos eslovacos en ríos, mares y océanos" se presentaron en el marco de una amplia exposición en el Museo del Transporte ubicado en la Estación Central de Trenes en Bratislava: barcos, tecnología naval, fotografías, equipamiento de barcos, historia de las compañías navieras, pero también despachos. El redactor Martin Jurčo visitó la exposición y entrevistó a su autor Martin Goduš.
Nuestra compañía pasó por cuatro nombres, Compañía Naviera del Danubio o Dunajplavba, Navegación Checoslovaca del Danubio, Navegación Eslovaca del Danubio y ahora nos llamamos Navegación eslovaca y puertos. Si bien empezó sus actividades empresariales ya en 1919, es decir, poco tiempo después del final de la Primera Guerra Mundial y de la fundación de la República Checoslovaca, siendo la primera empresa que operaba en aquel entonces en las aguas del Danubio, oficialmente la compañía nació más tarde, en 1922.
La flota inicial de 5 remolcadores de vapor y 44 remolcadores de 1922 creció hasta 112 embarcaciones de diversos tipos, tamaños y capacidades durante el siglo de funcionamiento. Hoy es una de las compañías navieras más grandes y estables del Danubio.
Nuestra compañía experimentó un auge después de la Segunda Guerra Mundial. En 1948 entró en vigor la ley según la cual en el campo de la navegación en el Danubio podían tomar parte exclusivamente los países que entraban en contacto directo con el cauce del río. Hay que recordar que antes del 1948 operaban en el Danubio ejerciendo actividades de navegación países como Inglaterra o Italia.
Navegación eslovaca y puertos presta servicios a las empresas más destacadas de su sector. Sin embargo, la espina dorsal de las actividades marítimas y portuarias de Bratislava es la cooperación con la acería Voestalpine, donde la compañía importa mineral de hierro. Se trata de la asociación comercial más larga e importante de la historia moderna de la empresa que, paulatinamente repartió su flota entre los tramos superior e inferior del Danubio y ha diversificado sus mercancías y sus buques para satisfacer cualquier necesidad de los clientes.
En el pasado el mayor volumen de mercancía transportada era destinada a la exportación hacia los países del llamado RVHP – Consejo de Ayuda Mutua Económica – que reunía a sobre todo una gran parte de los países socialistas. Sin embargo, aprovechamos la vía del mar Negro y mar Mediterráneo para exportar a Líbano y otros países del Oriente Próximo.
Narrar más de cien años de la existencia de una empresa tan importante significa hablar horas y horas y presentar toneladas de artefactos. ¿Qué es lo que pudieron ver los visitantes de la exposición?
La compañía nos prestó varios dispositivos de maquinaria, típicos de varios períodos de navegación, algunas campanas de a bordo, que son campanas náuticas que sirven a bordo de un barco para marcar los tiempos y pautas, considerándose piezas tradicionales del cargo de señales. Luego los visitantes pueden ver ruedas de timón, anclas utilizadas durante los pasados 100 años y varios tipos de iluminación de barcos. Una de las curiosidades es el filtro de agua de piedra que los barqueros usaban para filtrar el agua del río y convertirla en agua potable. Desde el punto de vista técnico son muy interesantes los dispositivos de navegación de varias épocas y los velocímetros.
¿Había alguna curiosidad particular que sorprendiera a los visitantes?
Una de las especificidades del Danubio, en comparación con otros ríos, es que los kilómetros no se calculan desde la fuente sino desde su delta.
A los visitantes de la exposición les acompañaba un simpático guía, el barquero Stanislav Drdoš, que ha pasado toda su vida como maquinista.
Yo empecé a trabajar en la navegación del Danubio en 1969, tras haber regresado del servicio militar obligatorio. Durante los primeros 20 años trabajé aquí, en el Danubio, pero luego empezaron a enviarme a embarcaciones marítimas. Obviamente antes había que pasar por varios cursos de formación y obtener varios certificados. Nuestra compañía poseía 70 barcos fluviales y 7 marítimos.
Para muchos trabajadores, Navegación Eslovaca del Danubio fue el único empleador en su carrera profesional. Uno de los objetivos de la empresa es que los empleados clave no se marchen, ni siquiera los que alcanzan la edad de jubilación, lo que es excepcional en Eslovaquia. La compañía emplea actualmente a unas 600 personas.
Yo trabajé en los barcos que llevaban los nombres de Lednice y Bojnice. Estos fueron de mares interiores, es decir, se destinaron a navegar en el Mar Negro, el Mar Mediterráneo, el canal de Suez y el Mar Rojo hasta Somalia y Eritrea.
Saliendo de Eslovaquia, el Danubio pasa por Hungría, Croacia, Serbia, Rumanía, Bulgaria, Moldavia y Ucrania. La mayor parte del territorio del delta se encuentra en Rumanía, cerca de la ciudad de Tulcea, y una parte en la región ucraniana de Odessa. Luego, desde el Mar Negro, los barcos eslovacos pueden pasar a otros mares alcanzando océanos.
Tengo que recordar nuevamente que yo trabajé sobre todo durante la época del socialismo, cuando el intercambio comercial se realizaba sobre todo en el marco del llamado RVHP – Consejo de Ayuda Mutua Económica. Aparte de ello se negociaba con los países de África septentrional como por ejemplo Marruecos, Libia, Egipto… en aquel entonces en estos países y en el Oriente Próximo se construía mucho y así la mercancía principal que transportábamos a aquellos países era material de construcciones, material metalúrgico, hojas de metal laminadas, madera, a Chipre traíamos los coches Škoda 120, etc.
En la actualidad para preservar el transporte marítimo y el transbordo de mercancías en los puertos de Bratislava y Komárno, la compañía repara y moderniza periódicamente la flota, las instalaciones de transbordo, así como las infraestructuras y la gestión de los almacenes. Sin embargo, desde el punto de vista del desarrollo de la empresa, era crucial modernizar la terminal de contenedores del puerto de Bratislava. Se trata de la única terminal trimodal de Eslovaquia. Volviendo al pasado, un viaje tan largo obviamente requería turnos laborales extremadamente largos, típicos de la profesión de los marineros, ¿verdad?
El turno laboral para navegar hasta el Mar Negro y volver duraba de 4 a 6 semanas. Después teníamos una semana libre y luego nuevamente volvíamos a navegar. Después de dos turnos de mar nos tocaba pasar un turno de navegación fluvial, es decir, quedarse prácticamente en casa. Había también turnos del todo marítimos, cuando teníamos que pasar navegando 6 meses enteros.
Como usted era un barquero leal y entusiasmado, igualmente hoy desempeña el cargo de guía de la exposición leal y entusiasmado…
Claro, es una profesión muy interesante y tengo que decir que no es apta para cualquiera. Para mí es un honor poder trabajar aquí como guía de la exposición. Esta posibilidad me ha sido ofrecida probablemente por haber trabajado en el barco Šturec como asistente de maquinaria y luego maquinista. El oficio de barquero es para mí una cuestión de corazón. Además de disponer de abundantes conocimientos referidos a los barcos y a la navegación, también hablo perfectamente inglés.
Las carreteras están muy congestionadas, se pierde tiempo en atascos y aumentan los costes de combustible y peajes. El transporte fluvial y marítimo es respetuoso con el medio ambiente para grandes volúmenes y, especialmente para distancias más largas, rentable. Todo ello contribuye a la nueva tendencia de desplazar los flujos de mercancías de la carretera al agua o al ferrocarril. La compañía de la Navegación eslovaca y los puertos es nuestra empresa más importante de servicios logísticos para el transporte de mercancías en el Danubio, así como en toda la red de vías navegables europeas entre el Mar del Norte y el Mar Negro.
Dunajplavba
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