Continuamos con la quinta parte de nuestra serie de concurso dedicado al 80 aniversario del Levantamiento Nacional Eslovaco. Escuchen con atención, ya que al final, tal y como es nuestra costumbre, formularemos otra pregunta para el concurso, pero antes que nada nos toca sortear al ganador de la vuelta previa. En la ronda número cuatro quisimos saber - ¿Cómo se llamaba el compositor eslovaco, autor de la sintonía de la radio rebelde, emisora libre, que transmitía desde Banská Bystrica? La respuesta correcta es Ján Cikker. El ganador es Enrique Sambataro de Argentina. ¡.Enhorabuena, querido amigo!
Hace 80 años la ciudad de Banská Bystrica se convirtió en símbolo de la lucha por la libertad. El 29 de agosto de 1944 se convirtió en el "corazón" del acontecimiento más significativo de la historia moderna, cuando los soldados eslovacos, apoyados por la población civil, mostraron su determinación de hacer frente al fascismo mediante un levantamiento armado. Dice Marian Uhrin, director del Museo del Levantamiento Nacional Eslovaco de Banská Bystrica:
En general, dividimos el curso del levantamiento en tres fases. La primera - fueron los primeros días hasta el 10 de septiembre, cuando el territorio insurgente era el más extenso. Los alemanes fueron ganando fuerza poco a poco y tuvieron que traer refuerzos adicionales para poder pacificar de alguna manera a los rebeldes; por supuesto, el levantamiento no se creó en condiciones ideales. Los partisanos no pudieron reaccionar con suficiente rapidez y adecuación al avance alemán. Los alemanes ocuparon la región con bastante rapidez, de modo que el 10 de septiembre se produjo la reorganización del ejército insurgente, se formaron seis grupos tácticos, cada uno con relativa autonomía dentro de su propia sección defensiva. También se formó un grupo aéreo. Esta reorganización hizo que el territorio rebelde pudiera ser defendido más fácilmente y que fuera más operativo. La segunda fase fue así... más exitosa en términos de defensa, aunque por supuesto los alemanes tuvieron la sartén por el mango.
El primer comandante y primer responsable de la preparación del Levantamiento Nacional Eslovaco fue el teniente coronel Ján Golian. Más tarde, en octubre de 1944, asumió el mando militar el general Rudolf Viest, que, como miembro del ejército eslovaco, emigró a Francia en 1939 y sirvió en las fuerzas militares de los aliados occidentales. La vida no es blanca o negra y en tiempos de guerra esto es doblemente cierto. Continúa el historiador Stanislav Mičev:
Por supuesto, la sociedad estaba dividida - parte de la población daba la bienvenida a los insurgentes, parte, por supuesto, se oponía a ello. Una parte acusaba a los rebeldes de llevar la guerra al territorio de Eslovaquia, pero esa guerra fue claramente iniciada por los nazis, y el Gobierno Popular Eslovaco fue su aliado en la guerra. El hecho de que fuéramos capaces de defendernos dice algo. El ejército alemán todavía no era débil, todavía era un ejército fuerte, porque desde agosto del 1944 hasta mayo del 1945 fue capaz de defenderse de los ataques tanto del frente oriental como del occidental.
Las ideas de que la insurgencia sería aplastada en una semana no se materializaron. Marian Uhrin:
A la tercera fase se la conoce como "ofensiva general de las tropas alemanas". Comienza en la última década de octubre de 1944. Los insurgentes ya no pudieron responder a la ofensiva porque estaban agotados y debilitados. Se quedaron sin municiones, combustibles, piezas de repuesto, de hecho, sin armas. Así que a finales de octubre podemos hablar de la retirada del ejército rebelde hasta el mismo centro del país, hacia Banská Bystrica. Sin embargo, esas tropas estaban ya tan debilitadas que, simbólicamente, al cabo de dos meses, el 28 de octubre, aniversario de la fundación de la República Checoslovaca, se dio la orden de pasar a la lucha de guerrillas. Se formaron grupos más pequeños del ejército rebelde para luchar en guerrillas en las montañas. También hay que decir que no era posible trasladar todo el ejército a las montañas, tanto desde el punto de vista del suministro, como desde el punto de vista del alojamiento, por lo tanto, una parte considerable de los soldados se dispersó a casa, algunos cayeron en cautiverio alemán, algunos permanecieron en estas nuevas unidades partisanas, o se unieron a las unidades partisanas originales.
El heroísmo de los partisanos y sus valores de vida eran tan fuertes que miembros de otras naciones y nacionalidades de todo el mundo se unieron a los eslovacos y a nuestro Levantamiento. El historiador Stanislav Mičev recuerda que, además de los eslovacos, había otras tres docenas de nacionalidades:
Estos eran los que ya vivían aquí: romaníes, rutenos, croatas, judíos y otros que simplemente se sienten como en casa en Eslovaquia. Luego estaban los prisioneros que escaparon de los campos de concentración y se encontraban en el territorio de Eslovaquia. Hubo grupos de partisanos que cruzaron el frente desde Polonia o desde Ucrania, por ejemplo. Luego estaban, por ejemplo, los franceses, una parte de los cuales cruzó desde Budapest, donde vivían bastante bien y sin embargo vinieron a luchar, y los otros eran de Dubnica nad Váhom, donde trabajaban como prisioneros en una fábrica de armas. Había estudiantes búlgaros que estudiaban aquí en la universidad, checos que cruzaban la frontera o eran residentes del Estado eslovaco, pero de nacionalidad checa. Los polacos también estaban cerca de nosotros, y cuando no podían luchar contra el nazismo en casa, venían aquí a ayudar. También había pilotos que fueron derribados sobre nuestro territorio, había húngaros antifascistas alemanes. Así que había realmente muchas de esas naciones. Eran personas que estaban en el territorio de Eslovaquia en el momento del levantamiento y querían luchar contra el nazismo. Ese era el atributo básico.
El 27 de octubre de 1944, la Radio Eslovaca Libre emitió las últimas noticias desde Donovaly y la mayoría de sus trabajadores se unieron a los partisanos; era imposible volver a casa. Los comandantes del Levantamiento Nacional Eslovaco, los generales Ján Golian y Rudolf Viest, también se escondieron en las montañas. El historiador Marian Uhrin habla de su destino:
El último cuartel general del ejército rebelde se encontraba en Donovaly, desde donde los generales Golian y Viest se dirigían, a través de los Bajos Tatras, hacia el este, hacia el frente. Su objetivo era cruzar el valle de Hron en dirección al macizo de Poľana y de allí hacia el este para encontrarse con el frente. Las tropas alemanas buscaban a los generales Golian y Viest, por lo cual peinaban los bosques y recababan información en los pueblos. El grupo partisano se redujo, algunos se separaron y finalmente acabó en Pohronský Bukovec, donde el 3 de noviembre de 1944 los generales fueron capturados. En un intento de evitar represalias contra la población civil del pueblo, no se opusieron a los nazis, al revés, se rindieron para no poner en peligro a las personas que los albergaban. Tras su captura, fueron trasladados de allí a Bratislava y luego a Berlín, donde se les pierde la pista en febrero de 1945: suponemos que perecieron en el campo de concentración de Flosenburg en algún momento del final de la guerra.
Aproximadamente 3.000 soldados y partisanos murieron durante el Levantamiento Nacional Eslovaco. Se suman a los 60 millones de tristes estadísticas de la Segunda Guerra Mundial, pero también son un testimonio del poder del hombre y de la importancia del sacrificio para el futuro de la civilización humana.
Nos pusimos del lado correcto como nación, como para lavar la vergüenza de haber sido los facilitadores de la Alemania nazi. Por supuesto que fue importante para la existencia continuada de Eslovaquia dentro de Checoslovaquia: la posición de nuestro país habría sido completamente diferente si no hubiera ocurrido. El Levantamiento Nacional Eslovaco también tiene un impacto en las fronteras dentro de las cuales Eslovaquia existe hoy en día. Por supuesto también da un marco histórico el hecho de que fuimos capaces de defender la libertad del país y los valores democráticos.
Acaba diciendo el historiador Marian Uhrin. En la última, sexta ronda, de nuestro concurso hablaremos sobre la liberación de Eslovaquia dentro de la operación militar de los Cárpatos y Dukla
Si han escuchado con atención, no tendrán ningún problema para responder correctamente a la pregunta de nuestro concurso:
Escríbannos los nombres de los generales eslovacos que comandaron el Levantamiento Nacional Eslovaco.
Envíen sus respuestas antes de finales de octubre a Slovak Radio, Radio Slovakia International, Mýtna 1, 817 55 Bratislava, Eslovaquia. La dirección de correo electrónico es rsi_spanish@slovakradio.sk . El afortunado ganador recibirá un bonito premio. ¡Mucha suerte, amigos!
80 años del Levantamiento Nacional Eslovaco – quinta ronda
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