El 6 de octubre empezó el festival cinematográfico eslovaco más importante, El Festival Cinematográfico Internacional de Bratislava, que durará seis días.
En comparación con el pasado, su actual 15 edición está demasiado reducida y más modesta. A pesar de ello, el público podrá ver en los cines bratislavenses alrededor de cien películas nuevas. Según un sondeo, este festival es, junto a los Días de Jazz y el mercado navideňo, una de las mayores atracciones turísticas que ofrece nuestra capital (refiriéndose sobre a los turistas de habla inglesa). ¿Por qué entonces ha perdido un 40% de su presupuesto? ¿Y cómo quiere ofrecer al público la misma calidad de los aňos pasados? Habla Vladimír Krajniak, director del Festival Cinematográfico Internacional de Bratislava: ”A partir del aňo 2008 sentimos los cambios en la sociedad y cada edición solucionamos el mismo problema, pues, ¿cómo modificar el festival para que pueda celebrarse y qué no pierda su prestigio y calidad? Este aňo la escasez de los recursos económicos nos ha obligado a tomar varias medidas, sin embargo hemos insistido en que no baje la calidad de la programación. No habrá tantas estrellas, pero todavía muchas buenas películas por ver. Las consecuencias de la crisis se afrontan también en el mayor país de Europa, en los festivales de Alemania. En cuanto al programa, para sus oyentes puede ser interesante que aparte de la cinematografía mundial, ofrecemos también las novedades de las producción eslovaca, en la sección titulada Made in Slovakia.”
La edición actual será celebrada sin la presencia de algún presidente o presidenta, u otro personaje representativo, no obstante el público ha alcanzado gracias a la reducción del presupuesto lo que anhelaba ya en el pasado, que el festival volviera desde los centros comerciales a los cines pequeňos del casco viejo. Un ejemplo de las consecuencias positivas de la crisis, verdad? Quiero también aňadir que este aňo continúa la tradición de fijar un nuevo nombre en el paseo de la fama bratislavense. Esta vez será el de la actriz Eva Krížiková.