En el Teatro Nacional Eslovaco permaneceremos durante unos momentos más, con el fin de presentarles una interesante campaña, lanzada durante el mes de abril y que continuará durante todo el 2022. Ésta se enfoca en la salud mental de nosotros, habitantes de Eslovaquia, perjudicados ya tanto por las restricciones, el creciente aumento de los precios, la guerra y un sinfín de amenazas que día tras días nos llegan desde los medios de comunicación. Lo primero que una nota en marco de esta campaña son los carteles con las fotos de las mujeres con sombreros extraordinarios y con el lema: ”Traigan su cabeza al teatro”. La directora del departamento de comunicación, Barbora Šajgalíková, explica:
”Después de dos años de epidemia, pensábamos que por fin iba a llegar el periodo de relajación, pero no, empezó la guerra y la inseguridad. Nuestras vidas en cierto modo resultaron deterioradas. Y dado que nosotros nos esforzamos a escuchar a nuestro público y atender sus necesidades, nos hemos decidido a ayudar a la gente a no abandonar sus propias vidas, sus deseos y visiones. La gente se sentía culpable de continuar normalmente con su vida. Pero no es así. Al revés. La guerra es una antítesis de la vida normal que todos anhelamos llevar y por lo tanto es imprescindible enfocarnos en la verdadera calidad de vida. Y con ello va en mano reunirse con la gente y buscar con conciencia experiencias de catarsis, que el teatro sin lugar a dudas brinda. No es ninguna solución ser inundados por las noticias malas, transmitidas por los medios de comunicación”.
Además, el teatro ofrece mucha inspiración sobre cómo afrontar los retos de la vida complicados.
”Exactamente. Y depende de los gustos de cada uno. Alguien prefiere admirar la belleza, otro quiere reírse y el tercer va a lo profundo. Cada uno acorde con sus preferencias… nuestro repertorio puede satisfacer a todos”.
Durante la epidemia surgían preguntas de si la gente iba a seguir visitando el teatro. Afortunadamente el teatro ha sobrevivido la crisis y todos han dado bienvenida a la libertad devuelta. Y ahora nos encontramos en otra situación, no menos grave. ¿Cómo se refleja la nueva crisis causada por la guerra y el flujo de refugiados en el mundo de teatro?
”Afortunadamente, las salas están llenas. Pero lo que ha cambiado es el comportamiento del público. Si antes la gente comparaba billetes con mucha antelación, ahora no es así. A menudo nos pasa que ni hasta el último día sabemos si se venden todas las entradas o no. La gente teme planear. Y se decide de verdad en el último momento”, alega Šajgalíková.
La campaña ”Traigan su cabeza al teatro” abarca también descuentos a los precios de las entradas, ya que los directores del teatro se dan cuenta del gran aumento de los precios y del temor de la gente de gastar.