El próximo aňo la cinematografía animada eslovaca festejará 50 aňos de su fundación. Es que en el aňo 1965 fue establecido en Koliba, empresa estatal de la cinematografía eslovaca, un departamento autónomo dedicado a los dibujos animados. La última vez hablamos sobre su personalidad más destacada, Viktor Kubal, y hoy me gustaría explicarles que se esconde bajo la palabra ”večerníček”.
El ”večerníček” fue un programa original creado por Televisión Checoslovaca y que consistía en las series de dibujos animados de diez minutos, transmitidos siempre a la misma hora y con la misma secuencia de apertura, cuyo protagonista fue el chico llamado Večerníček. El primer dibujo animado en este formato fue transmitido el 2 de enero de 1965 a las 19:00 horas. Sorprende que los niňos checos todavía, después de casi 50 aňos, disfrutan de los “večerníčky” a la misma hora, introducidos con el mismo chico con el gorro de papel. Los niňos eslovacos tuvieron que adaptarse en el aňo 1977 a un cambio, cuando fue creada una diferente secuencia de apertura particularmente para los eslovacos. Desde aquel momento el abuelito Večerníček con su amigo –el perro, introducen los dibujos animados en este territorio.
Para los niňos de ambos países de la ex Checoslovaquia mirar los ”večerníčky” es la costumbre diaria y un 80% de los adultos confiesan que también suelen sentarse de vez en cuando frente a la telvisión justo a las siete de la tarde para ver un dibujo animado, introducido por el abuelito bien conocido de su infancia. La autora de este personaje predilecto fue Anna Minichová. Su hija Katarína, organizadora de la Bienal de Animación Bratislava, recuerda:
“Es un verdadero fenómeno, un ícono de las transmisiones televisivas. Este formato nació con el fin de armonizar el día de niňos, de prepararlos antes de acostarse, por lo cual era muy tranquilo, sin momentos estresantes. Lo interesante es que luego las series de dibujos animados célebres, como son por ejemplo Puf y Muf, Danka y Janka o Čin Čin, fueron creadas en especial para este formato, no para el cine. Así, al ”večerníček” le merecemos un pléyade de personajes animados leyendarios. Naturalmente, hace 50 aňos los niňos no tenían acceso a internet, no disponían de posibilidades de ver dibujos animados, por lo cual se sentaban puntualmente a las siete frente a la televisión, siendo enamorados sobre todo de la secuencia de apertura. Para los niňos son muy importantes los ritos diarios y nos encanta que no hayan dejado de ser hinchas de este programa ni en esta sociedad consumista, llena de atractivos a cada paso.”
Tal y como ha aňadido Katarína Minichová, no teme la desaparición de los dibujos animados producidos en marco del programa de los ”večerníčky”. En las últimas dos décadas ha nacido una nueva y muy fuerte generación de los animadores.
“Los animadores recién licenciados siempre quieren hacer ”el gran arte”, no obstante cuando tienen sus propios hijos se dan cuenta de lo necesario que es ofrecer a los niňos dibujos animados de calidad y empiezan a centrar su atención en este tipo de programas. Estoy segura de que los cuentos para dormir no desaparecerán de la pantalla. Basta mencionar la última serie de dibujos animados de producción eslovaca ”Mimi y Lisa”,” precisa Minichová.
Cuando les fueron presentados a los representantes de BBC, durante su visita a Eslovaquia, los cuentos para dormir, o sea los “večerníčky”, se quedaron asombrados del enorme valor escondido en la larga tradición de este programa y la popularidad que ha tenido entre varias generaciones de eslovacos. A ver, si también los mismos eslovacos se darán cuenta del tesoro que tienen y desarrollarán sus capacidades.