Como primero hablará Rudolf Urc, cabeza del mencionado Departamento de Dibujos Animados: "Después del aňo 1989 la cinematografía animada cayó en desuso, al igual que otros géneros cinematográficos y yo diría que se cometieron graves daňos sobre el ámbito cultural. Fue algo chocante, sobre todo el hecho de que incluso la televisión eslovaca participó en la liquidación de dibujos animados. Además ocurrió a finales de los aňos 80, cuando habíamos logrado una calidad excelente en este ámbito. Naturalmente ha sido sobre todo cuestión de dinero, pero hay que darse cuenta que el dinero no es todo y la falta de cultura pronto se reflejará de una manera negativa en todos los ámbitos de la vida social. De esta manera estamos importando basura del extranjero y nuestros cineastas de calidad no pueden dedicarse a su trabajo. Y nuestras buenas películas siguen siendo presentadas en el extranjero..."
Esta situación afortunadamente en los últimos aňos haya mejorado un poco. Por ejemplo la Televsión y Radio Eslovaca produjo el aňo pasado un dibujo animado nuevo, llamado Mimi y Lisa. No obstante todavía es muy poco en comparación con el famoso pasado. Habla Katarína Minichová, jefa de la programación de la Bienal de animación de Bratislava:
"Yo soy optimista. La verdad es que durante diez aňos no se producía nada, es un hecho histórico, pero ya hemos entrado en un nuevo período. En aquellos diez aňos silenciosos se ha formado una nueva generación, la que no quiere aceptar lo rutinario "no se puede", "no es posible". Claro, actualmente los dibujos animados van naciendo en producción de empresas privadas, lo que es siempre difícil en nuestro pequeňo mercado, pero también es una parte del proceso de desarrollo sano. Además importa mucho que la Televisión y Radio Eslovaca han empezado a demostrar su interés en este tipo de cinematografia, lo cual considero como una seňal del futuro más favorable para los dibujos animados."
"Nuestros estudiantes son muy talentosos y no es posible silenciar su voz. No obstante, existe el riesgo de que escapen al extranjero antes de que las condiciones aquí mejoren. Y con sus habilidades, una vez en el extranjero, siempre logran el éxito", aňade Rudolf Urc.
Los jóvenes creadores de dibujos animados ya han alcanzado varios éxitos. Por todos mencionaré sólo las películas El Último Autobús, Pandas, Cuatro o La Nieve. Las dos últimas películas mencionadas provienen del taller de la animadora Ivana Šebestová. La película Nieve, estrenada el aňo pasado, de duración de 18 minutos estaba preparando durante 6 aňos. ¿A qué se debió este tiempo de creación tan largo?
"Tiene que ver con el deseo por la perfección. Es que la película narra el tema de la perfección, porque su protagonista va buscando un copo de nieve perfecto y yo también iba buscando la perfección de la expresión cinematográfica", dice Šebestová.
Usted ha tenido la suerte fantástica, que la empresa productora de su filme pertenece a sus amigos que le han ayudado. Pero también Usted ha ayudado a otra animadora Katarína Kerekešová o a su cólega Martin Snopek. Parece que en este ámbito en Eslovaquia uno ayuda a otro, sin considerarse rivales.
"Sí, es verdad. Nosotros, los creadores de dibujos animados eslovacos, formamos una asociación libre y cooperamos mucho, lo que es maravilloso, porque una sóla persona no puede hacer hoy en día un filme animado entero."
La película La Nieve se distribuyó en los cines como una película cortometraje proyectada delante de la película principal. Igualmente lo pasó con su película Cuatro.
"Se trata de una forma de distribución que no existe en todos los países europeos. A mí me encanta mucho esta posibilidad, dado que mis películas están destinadas al cine", alega la exitosa cineasta Ivana Šebestová.
