En el pasado cuando culminaba la temporada de los carnavales se organizaba un cortejo de máscaras que recorría todo el pueblo. A la cabeza iban los músicos, indispensables eran el violinista y el acordeonista. Como paseaban por el pueblo se unían a ellos los jóvenes, que cantaban y bailaban. A los que estaban esperando el cortejo delante de sus portones los jóvenes los invitaban a bailar. Y ellos luego, en muestra de agradecimiento, les daban algo bueno de comer.
En el pasado se organizaban los cortejos de máscaras casi en cada pueblo. Había algo particular, algo original en Žemberovce, a parte del cortejo?
En ese periodo se hacían muchas bromas, la gente se tomaba el pelo, lo que en otros días del año era inadmisible. Entre las prácticas más usadas, por ejemplo, poner hollín, crema o manteca en las manijas de las puertas o robarse algo, etc.
Supongo que ustedes reanimando las viejas costumbres y tradiciones habrán conservado algo de estos cortejos y de las bromas.
También en la actualidad organizamos el cortejo de máscaras que representan a varias personalidades de aquel entonces, soldados mercenarios, etc. Paseando por el pueblo, por ejemplo, quitamos el cubo de la basura de una casa y lo ponemos delante de otra. Sin embargo, con estas bromas tenemos que tener cuidado. No todos nos toleran eso. Incluso nos han criticado en un periódico por haber untado la manilla de la puerta de un coche con una mezcla de betún y hollín. Si bien en aquel entonces se reía todo el pueblo, nosotros fuimos tildados de incultos. Afortunadamente aún existen personas que saben disfrutar de este tipo de entretenimiento y de las tradiciones. Es que hay muchísima gente de fuera que había comprado casas aquí y entre ellos hay de todo. Algunos incluso se entretienen con nosotros pero hay varios que piensan que les queremos hacer algo malo. Digo, hay que tener cuidado...
En la reanimación de las viejas costumbres y tradiciones toma parte también el grupo folclórico Žemberovčan. Habla su miembro, señora Marta Hamarová
Nosotros en Žemberovce tenemos un rico repertorio de canciones para numerosas ocasiones. Cantamos durante el período de carnavales, pero también cuando damos la bienvenida a los recién nacidos, en las bodas, durante el levantamiento de los palos llamados "mayos", etc. Estas canciones no tienen origen directamente en nuestro pueblo, sino en toda la región de Tekov. Cuando damos vuelta por la región y descubrimos alguna canción que nos gusta, la añadimos a nuestro repertorio, así es. Actualmente somos 18 cantantes dirigidos por la señora Mária Bernátová de Levice.
En este momento ustedes se han reunido para hacer un ensayo. Que nos van a cantar ahora?
Le vamos a cantar una canción melancólica y un poco triste que se llama Dedinka naša - Pueblito nuestro. Con esta canción solemos expresar el agradecimiento a nuestras madres por habernos dado la vida.
Y para concluir nos podrían cantar alguna canción predilecta. Tiene usted una canción a la cual está particularmente aficionada?
A mí personalmente me gustan todas las canciones de nuestro repertorio. Y puesto que actúo también de solista, me las sé muy bien de memoria y las interpreto según mi estado de ánimo. A veces es una canción alegre, a veces triste y otras puede ser divertida. Yo suelo cantar en cualquier sitio donde me encuentro - en el baño, en el patio... Jamás he rechazado una invitación para venir a cantar. El canto me llena de alegría, no existen palabras para explicar es sensación. Ahora estamos aprendiendo una canción muy ocurrente que trata sobre un aguardiente. Dice: el aguardiente se durmió y la copita lo llamó, despiértate aguardiente y ven entre la gente.
Fašiangy Žemberovce
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