El sector de la Educación: otro punto de división de la coalición

Ayer se celebró una de las mayores marchas de protesta de los empleados del ámbito de la educación en la historia moderna eslovaca. Se produjo una concentración de protesta formada por miles de personas frente al palacio presidencial y al parlamento. Estas personas gritaban: "vergüenza" o "queremos salarios más altos". Los miles de trabajadores de la educación presentes en la manifestación en Bratislava exigieron mejores condiciones en la enseñanza, así como mayores salarios. Los manifestantes, encabezados por la dirección del Sindicato de Trabajadores de la Educación y la Ciencia de Eslovaquia, consideran que la indexación salarial del cero por ciento en 2021 y del tres por ciento a partir del 1 de julio es totalmente insuficiente. Quieren que sus salarios aumenten un diez por ciento en lugar de un tres por ciento. El ministro de Educación, Branislav Gröhling, ha afirmado que el aumento salarial del 3% para el personal escolar a partir del 1 de julio está cubierto económicamente y se están discutiendo nuevos aumentos. Confirmó que el ministro de Finanzas, Igor Matovič, había presentado en la reunión de coalición una propuesta de aumento del diez por ciento de los salarios de los empleados del sector educativo mediante una subida de impuestos. "Lo hemos vetado. Insistimos en que esos fondos se pueden cubrir con la recaudación excesiva de los impuestos actuales", añadió el ministro de Educación del partido Libertad y Solidaridad (SaS). Cabe alegar que Igor Matovič es el jefe del partido OĽaNO y el conflicto en el seno de la coalición en diversas cuestiones económicas se desarrolla precisamente entre estos dos partidos. ”La remuneración adecuada de las personas que se dedican a la educación, pero también a la asistencia sanitaria y a la ayuda a las personas en riesgo de pobreza, debe ser una prioridad para el Estado, especialmente en estos tiempos difíciles”, así lo ha declarado la presidenta, Zuzana Čaputová. La jefa de Estado apoya sus demandas y las considera justas. Sin embargo, la presidenta oficialmente ha pedido el aumento del presupuesto solamente en el ámbito de Defensa. "Para poder ayudar a los profesores, para poder darles recursos adicionales, también necesitamos recursos para el presupuesto. Ninguno de nosotros contaba antes de las elecciones con que habría una pandemia, una crisis energética y una guerra", señaló el presidente del Gobierno, Eduard Heger. Michal Rehúš, analista del Centro de Análisis Educativos, opina:” Las negociaciones entre los representantes de los empleados del ámbito de educación y los funcionarios del gobierno no han conducido a nada y en tal situación la única opción que queda son acciones de presión pública para mejorar las condiciones de trabajo. Si, incluso después de esta protesta, no se produce un aumento significativo de los salarios en el sector de la educación, es perfectamente legítimo que se produzca una fuerte huelga en otoño”.