Eslovaquia deja de acercarse al nivel económico de los países más desarrollados de la Unión Europea

Los analistas económicos y financieros del Banco Nacional Eslovaco han presentado recientemente un nuevo análisis económico en el que señalan que la República Eslovaca ha disminuido el ritmo de acercamiento al nivel económico de los países miembros más desarrollados de la Unión Europea y necesita urgentemente variar su modelo económico. A decir de uno de los analistas antes mencionados, Marián Labaj, uno de los problemas principales de nuestro país consiste en nuestra incapacidad de aprovechar plenamente todos los recursos económicos, provenientes de los fondos comunitarios, destinados principalmente a la inversión en la modernización económica, la inclusión social y el desarrollo de nuestras regiones. A decir de Labaj, después de nuestro ingreso en la Unión Europea, los recursos económicos de los llamados fondos europeos impulsaban nuestro crecimiento económico, pero posteriormente empezaron a sustituir completamente las inversiones públicas por parte del Estado eslovaco y comenzaron a perder su efecto positivo. Según sus palabras, en comparación con otros países miembros de la Unión Europea que entraron en la comunidad económica europea junto a nosotros, como por ejemplo Estonia, Hungría, Letonia, Polonia, Chequia o Eslovenia, nuestro nivel de inversión pública se encuentra inferior, lo que luego deriva en un crecimiento económico más bajo. El experto y analista de las finanzas públicas del Banco Nacional Eslovaco, Marián Labaj, también destaca que, aunque la inversión pública no impulsa inmediatamente el crecimiento económico, una infraestructura pública de calidad puede a largo plazo apoyar tanto la productividad económica como también el crecimiento económico. Como uno de los ejemplos más claros menciona el sector de la educación. A decir de Labaj, el proceso de modernización de nuestras universidades y de nuestros centros de educación superior no tiene que requerir de muchos recursos económicos, pero el efecto de una enseñanza de calidad, reflejada luego en una mano de obra mucho más cualificada, resulta ser indudable. Según sus palabras, por otro lado, tenemos problemas con nuestra disciplina presupuestaria. Si la inversión pública no alcanza unos niveles superiores, el déficit presupuestario del Estado tampoco debería ser muy alto. Pero el problema de nuestro país consiste precisamente en eso. A pesar de una inversión pública por debajo de la media de la Unión Europea, el déficit de las arcas del Estado alcanza actualmente niveles récord. Labaj concluye que en nuestro país existe una tendencia a aprovechar los llamados eurofondos para sustituir nuestra propia inversión pública en lugar de usarlos como un impulso económico adicional.