Igual que a nivel mundial, también en la República Eslovaca continúan cayendo los precios de la vivienda, principalmente a medida que aumentan los costes relacionados con los préstamos hipotecarios. Incluso, algunos de los analistas del mercado inmobiliario destacan, que la caída actual les recuerda la crisis del año 2008 y vaticinan que los precios seguirán bajando. Según los últimos datos presentados por el Banco Nacional Eslovaco, los precios de la vivienda en nuestro país han disminuido durante los últimos doce meses un 10% y en comparación interanual se trata de una reducción en un 7%. Los agentes inmobiliarios resaltan que, aunque la situación actual se parece mucho a la situación del 2008, la realidad en el mercado inmobiliario de nuestro país es distinta. En aquel entonces, la crisis hipotecaria, iniciada en Estados Unidos, reflejada luego en un decrecimiento económico global, provocó una caída de los precios de la vivienda de un 20% en dos años. Según sus declaraciones, en cuanto a los números, la situación actual se parece mucho a la del año 2008.
El director de una de las mayores compañías inmobiliarias que operan en nuestro país, Rastislav Valovič, de Alto Real Estate proclama, que del mercado eslovaco han desaparecido casi por completo todos los clientes que compraban y vendían pisos y casas como una forma de inversión con el objetivo de ganar dinero y maximizar los beneficios del alquiler. A decir de Valovič, actualmente no tiene mucho sentido construir, entre otros, oficinas y apartamentos. En cambio, pisos y casas siguen siendo una inversión segura. Según sus palabras, la demanda de los clientes ha descendido notablemente, los compradores alargan más el proceso de decisión y comparan mucho más todas las ofertas existentes en el mercado. A pesar de la realidad antes mencionada, Valovič espera por ejemplo una demanda que iría desde unos 30 mil hasta 100 mil pisos nuevos en nuestra capital, Bratislava. Pero igual que sus colegas del sector, él mismo también admite cierto nerviosismo y desconcierto ya que todo el mercado pasa por un cambio cíclico y la caída de la demanda, especialmente en la compraventa de viviendas, es notable.
Peter Sabaček Foto: TASR