ČESMAD Eslovaquia, la asociación de transportistas por carretera de la República Eslovaca, ha expresado su indignación por la reintroducción de controles en los pasos fronterizos más transitados de Eslovaquia. Según la asociación, los transportistas se han convertido en rehenes de una migración no gestionada, por lo que no descartan volver a hacer huelga o bloquear las carreteras. La asociación hizo el anuncio el martes 3 de octubre en el contexto de la introducción de controles en las fronteras con Eslovaquia por parte de Austria, la República Checa y Polonia en relación con la migración irregular. "El año pasado las mismas medidas provocaron un aumento de la siniestralidad, con víctimas mortales incluidas, y un empeoramiento significativo de las condiciones de los conductores, tras la formación de colas de tráfico en las carreteras", declaró Roman Kment, portavoz de ČESMAD Eslovaquia.
Los transportistas por carretera piden que finalmente se pongan en marcha medidas eficaces para hacer frente a los problemas de la política migratoria. "ČESMAD Eslovaquia pide a los gobiernos que busquen medidas más eficaces en las fronteras exteriores de la Unión que no creen barreras a la circulación transfronteriza de personas y mercancías dentro de Schengen, sino que mantengan una cadena de suministro fluida y un tráfico por carretera seguro", añadió Kment. "Para mitigar el impacto durante la adopción de las medidas, proponemos la introducción de principios en forma de los llamados Carriles Verdes, que han contribuido significativamente a la preservación de las cadenas de suministro incluso durante la crisis del Covid", afirma Pavol Piešt'anský, presidente de dicha asociación.
Austria introduce controles temporales en su frontera con Eslovaquia a partir del 4 de octubre. La medida, destinada a combatir la inmigración irregular, estará en vigor al menos diez días. El objetivo de los controles es impedir que los traficantes de migrantes utilicen rutas alternativas. La República Checa y Polonia también están introduciendo controles temporales en la frontera con Eslovaquia para luchar contra la entrada ilegal de migrantes.