El desarrollo de la inteligencia artificial conlleva grandes retos, pero al mismo tiempo no hay que temerla. Hay que centrarse en su uso adecuado. Durante la conferencia Itapa AI & Robotics del martes, el Presidente del Parlamento eslovaco, Peter Pellegrini, bajo cuyos auspicios se celebró el evento, llamó la atención sobre este hecho. Según él, Eslovaquia se enfrenta a dos retos fundamentales a este respecto. Se trata de la creación de un nivel de regulación adecuado y razonable, y también de la preparación de los ciudadanos de a pie para la forma en que las nuevas tecnologías cambiarán la sociedad. "Tenemos que encontrar un nivel nacional de regulación, pero sólo en aquellas áreas en las que la inteligencia artificial suponga un riesgo. Esto debe establecerse y definirse de forma proporcionada, de modo que incluso algo que en última instancia beneficia a la sociedad o a la economía no se considere un riesgo", añadió Pellegrini, partidario de una regulación marco y no demasiado detallada. Una buena base, según él, es el primer borrador de las normas surgidas en el ámbito de la Unión Europea. "La segunda gran tarea importante para nosotros es preparar a la sociedad eslovaca para los grandes cambios que nos esperan", subrayó el Presidente del Parlamento. Dijo que podemos inspirarnos en la iniciativa del Gobierno de Singapur, que se dispone a educar en la materia a todos los ciudadanos mayores de 40 años. Según Pellegrini, la inteligencia artificial ya se utiliza en muchas empresas de Eslovaquia. Gracias a ella, están ahorrando costes y aumentando la rentabilidad. "Hay sectores en los que los robots ya se comunican con los clientes y, basándose en la inteligencia artificial, son capaces de mantener una conversación contigo, pero a menudo una persona ni siquiera lo reconoce ni lo siente", dijo. Apreció que el sector sanitario eslovaco se esté interesando poco a poco por este tema. La inteligencia artificial puede, por ejemplo, ayudar a detectar enfermedades con mayor precisión y rapidez. También ayuda a simular diversas pruebas de laboratorio y a encontrar curas para distintas enfermedades. Pellegrini también ve el uso de la inteligencia artificial en las oficinas y en el funcionamiento de los gobiernos locales. Un ejemplo sería comprobar las declaraciones del impuesto de bienes inmuebles y comparar los datos que figuran en ellas con los registrados en el catastro. También puede evaluar muy rápidamente diversas peticiones a los funcionarios y sugerir inmediatamente una respuesta adecuada a tal solicitud. "Hay innumerables de estas áreas y, por supuesto, hay que apoyar cada una de ellas para que tengamos ese beneficio de la inteligencia artificial lo antes posible", añadió Pellegrini.
Pellegrini resalta la necesidad de educar a los ciudadanos en la materia de la inteligencia artificial
14. 03. 2024 14:07 | Tema del día
Mária Mangová; Foto: TASR