Según advierte Marián Kočič, analista macroeconómico del banco Slovenská Sporiteľna, la evolución demográfica puede influir gradualmente en los precios de los inmuebles en Eslovaquia durante las próximas décadas. A decir de sus palabras, la curva de población para el grupo que más a menudo compra una vivienda se rompió en 2010. Y según está previsto, para 2035 la población de una edad entre 25 y 34 años se reducirá en otro 25 %, es decir, en unos 200.000 habitantes. “Es posible que en la próxima década veamos también cambios estructurales en la demanda de vivienda, o cambios en la dinámica de crecimiento de los precios de los inmuebles. Además de que en 2035 cientos de miles de residentes en edad de trabajar salgan del mercado laboral, también se reducirá el grupo objetivo que con más frecuencia compra vivienda nueva. Dado que Eslovaquia es uno de los países con una mayor proporción de viviendas ocupadas por sus propietarios, éste es un factor a tener en cuenta”, recalcaba el analista. Señaló que los eslovacos viven en hogares relativamente superpoblados en cuanto al número de personas, y en comparación con la República Checa, en teoría nos faltan cientos de miles de pisos. El cambio demográfico podría verse frenado por la migración extranjera, afirmaba, a pesar de que la República Eslovaca no se encuentre entre los líderes de la región en cuanto a atracción de trabajadores altamente cualificados de terceros países. Un impulso al crecimiento de los precios inmobiliarios podría venir también de los eslovacos que viven y trabajan en el extranjero y que, por lazos familiares, desean tener una propiedad en Eslovaquia. “La demografía y la reducción de los hogares debido a la disminución de la natalidad también pueden afectar en este sentido. Los efectos del descenso de la población sobre la demanda de propiedades más pequeñas también podrían verse mitigados por la tendencia a la llamada vida de soltero, pero es probable que esto también se vea sometido a presión en un entorno de tipos más altos”, advirtió el analista. Señaló que, después de que la financiación para la compra de vivienda se encareciera y los salarios dejaran de seguir el ritmo de la inflación, la compra de una vivienda se hizo significativamente más asequible cuando la compra se realiza en pareja. Hay toda una serie de factores que influyen en el precio de la vivienda en uno u otro sentido, señaló Vladimír Kubrický, analista de la Unión Inmobiliaria de Eslovaquia. “Sin embargo, las personas que sólo necesitan ocuparse de su propia vivienda no pueden dejarse influir demasiado por diversas consideraciones y especulaciones sobre la evolución futura de los precios de los pisos o casas, y mucho menos a largo plazo, a la hora de comprar. De lo contrario, la mitad de las familias con hijos de Eslovaquia seguirían viviendo hoy en un piso de uno o dos dormitorios”, afirmaba Kubrický. Aun así, dijo, podría entrar en juego algo que produjera un cambio radical en la vida de la gente. “Recordemos cómo todos los análisis y previsiones se desvanecieron de repente durante la pandemia de coronavirus. Por otro lado, es bueno saber qué ciudades de Eslovaquia tienen tendencias demográficas desfavorables. Los inversores inmobiliarios prefieren elegir una propiedad en un lugar donde la población no esté disminuyendo y se fijan más en estas propiedades a la hora de comprar”, finalizaba el analista.
La demografía eslovaca puede afectar a los precios de los inmuebles
23. 09. 2024 12:30 | Tema del día
Hilari Ruiz de Gauna i Torres; Foto: TASR