El año 2023 ha traído a los viticultores y vinateros eslovacos varias amenazas, sorpresas y problema y por ello resulta bastante difícil evaluar la vendimia y la producción del año 2023. Nosotros nos dirigimos a la jefa del Gremio de los viticultores y vinateros de Eslovaquia, Viera Baričičová.
A pesar de las condiciones climáticas, que realmente fueron catastróficas, la producción vinatera del año pasado parece ser excelente en el momento de su finalización.
Los viticultores suelen evaluar la vendimia tanto desde el punto de vista de la calidad, como de la cantidad. Justamente la cantidad de la uva representa en la producción del vino del año pasado el punto más crítico.
Algunos miembros de nuestro gremio señalaron el descenso en la cantidad de la producción de entre 10 y 60%. Es una gran caída. Sin embargo, este fracaso lo podría recompensar una buena calidad. Gracias al buen tiempo, el clima bien cálido y soleado que había hecho casi todo el verano y también el otoño, creció bastante el contenido del azúcar en las bayas. Según la información que hemos obtenido de nuestros viticultores hasta ahora, los vinos de la añada 2023 serán vinos de una calidad superior.
Aparte del vino joven que ya ha sido catado y vendido en noviembre del año pasado, el resto de los vinos de la añada 2023 aún tiene que terminar de madurar. Entonces para poder catarlos y expresar veredictos referidos a su calidad aún tenemos que esperar. En algunos casos se trata de solo 2-3 semanas, pero en otros hay que esperar más tiempo. El hecho de que la cantidad del vino sea mucho menor no es, según la señora Baričičová, del todo negativo.
Este año, gracias a la menor vendimia del año pasado, podríamos continuar vendiendo los vinos de los años anteriores que se nos quedaron en los almacenes y tabernas. Es que durante la pandemia perdimos completamente la clientela hotelera y de los restaurantes. El vino se vendía prácticamente solo en los supermercados. Así que, los consumidores más exigentes probablemente optarán por los vinos del 2023, que sin dudad alguna los satisfarán y el resto de ellos podrá comprar vinos de las añadas anteriores, siempre excelentes y quizás por un precio más conveniente.
La acumulación de reservas de los años pasados se debe tanto al descenso del consumo durante la pandemia, como a la mayor importación de vinos desde extranjero. En la actualidad todo el mundo vinatero eslovaco se empeña en volver a la normalidad. Sin embargo, la competitividad de parte del vino extranjero siempre suscita inquietud en los vinateros eslovacos. La vinatera Baričičová opina que, no obstante, la superficie de los viñedos eslovacos disminuye y muchos quedan abandonados, descuidados o desaparecen bajo la maquinaria de las empresas constructoras, en Eslovaquia aún hay muchos vinateros y viticultores que están convencidos de continuar produciendo vino.
Nuestros miembros son los viticultores pequeños y medianos, es decir, las empresas familiares. Realmente en las actividades empresariales suelen estar involucrados todos los miembros de la familia. Esto es una garantía de que la empresa tiene su futuro. Además, los hijos jóvenes de estas familias moviéndose desde su infancia en el ambiente vinatero, a menudo eligen estudios en los institutos técnicos que de alguna manera están relacionados con la viticultura. Entonces, con mucho agrado, podemos constatar que en Eslovaquia está naciendo una generación de buenos vinateros, viticultores expertos, que en la actualidad son hijos de nuestros miembros.
Como serán los vinos del 2023
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