La pasada semana tuvo lugar en el pueblo de Tisovec el tercer encuentro de los espeleologos – buceadores en el cual se recordaron del aniversario de 40 aňos pasados desde el descubrimiento de la gruta Teplica.
Con esta ocasión su descubridor Tibor Šašvári, buceador espeleologo, ha sido incluso galardonado por el alcalde de Tisovec.
Del momento de su descubrimiento se recuerda así.
Sumergiéndonos hemos explorado muchas grutas y cuevas eslovacas y, de esta manera, llegamos a descubrir 40 aňos atrás la gruta Teplica. Recuerdo que necesitamos tres tentativas para encontrar el acceso justo. Admito que en nuestro trabajo es necesario ser muy atrevidos, sobre todo siempre que hay que pasar por una garganta, por una apertura o hay que superar alguna barrera bajo la superficie del agua. Descubriendo Teplica tuvimos que pasar por una garganta de 40 cm, para hacerlo incluso tuvimos que quitarnos por un instante el equipaje y así se nos abrieron las primeras salas de la gruta y descubrimos los primeros 300 metros de ella. La impresión más fuerte nos la dió un salto de agua de 16 metros de altura. Nunca antes había visto un salto de agua tan grande en una gruta y en una tal profundidad bajo la superficie. Pero lo mas importante fue que descubrimos la gruta y así confirmamos su presunta existencia.
En el marco del encuentro de los espeleólogos – buceadores asistimos a la visita de la misma gruta Teplica, guiados por Dušan Huťka coordinador del Club de Espeleologos en Tisovec.
Con ocasión del 40 aniversario del descubrimiento de la gruta decidimos organizar este encuentro para motivar a la generación más joven de buceadores en continuar el descubrimiento de esta gruta que seguramente aún esconde tesoros desconocidos. Al mismo tiempo es necesario que la generación más vieja entregue sus experiencias y conocimientos a los jovenes, puesto que se trata de un trabajo muy peligroso. Hay que documentar todo dibujandolo en el mapa y puesto que una gran parte de la gruta se halla bajo el agua, hay que continuar sumergiéndose. Y como ya he dicho bucear en una gruta no es como bucear en un lago o en el mar, es mucho más difícil. Desgraciadamente debo decir que de los numerosos buceadores que fallecieron de esta manera, uno de ellos encontró la muerte aquí, en esta gruta. Fue en 1994 y el motivo fue justamente su escasa experiencia.
Entrar en la gruta parece bajar por un embudo de hierro.
Realmente es una hendidura un poco extendida y reforzada con un tubo metalico de tal manera que pueda servir de entrada y que se pueda cerrar con llave. Ahora, bajando por una escalera colocada en el tubo metalico entraremos en la sala de entrada de la gruta. ... Hemos bajado deteniéndonos 20 metros bajo la entrada y ahora nos encontramos en otra hendidura, muy importante, que es la que usaron para acceder a la gruta sus descubridores.
Será difícil abrir esta gruta para el público de manera masiva y durante todo el aňo.
La gruta esta llena de hendiduras y continúa estando activa. Cuando hay períodos de masivas precipitaciones una gran parte de ella se llena del agua. Dado que ahora las paredes de caliza están al descubierto podemos ver los sedimentos de manganeso y de hierro, por eso tienen color marron y negro. Antes de haber descubierto la via de acceso más facil los buceadores tuvieron que pasar por numerosas hendiduras y por un largo sifón de 18 metros. Así encontraron la entrada, cuya modificación luego duró tres aňos. Después nadie más necesitó entrar buceando por el sifon.
Y que han encontrado en la gruta sus descubridores? Se habló algo sobre los huesos de los osos... Pero si hay tanta agua y el acceso es tan difícil, como pudieron llegar los osos aquí?
Entre los sedimentos encontrados en la parte central de la gruta descubrimos los huesos de un oso cuya edad se estima en 12 mil aňos. Suponemos que los huesos llegaron aquí a través de una entrada que nosotros aún desconocemos. Quizás un día la encontraremos. Entre la gruta de Teplica y la localidad de Suché doly hay probablemente cerca de 2 kilometros de otras galerias y hendiduras de la gruta que aun quedan todas de descubrir. Por eso creo que esta gruta tiene un enorme potencial de descubrimiento. Y puedo revelar que cuando uno entra en una nueva gruta se siente como si aterrizara en la Luna, puesto que puede ver y tocar lugares que nadie ha visto en miles o millones de aňos.
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