Este año, el barrio bratislavense Rača ha vuelto a organizar la fiesta de la vendimia Račianske vinobranie, un evento que ofrece a los visitantes la oportunidad de apoyar a los viticultores y bodegueros locales. “Espero que, a pesar del tiempo, vengan a apoyar a nuestros viticultores y propietarios de viñedos, que han trabajado muy duro para preparar el “burčiak”, el vino y otros productos de vino. Al hacerlo, también contribuiréis a salvar los viñedos de Bratislava”, declaró el alcalde de Rača, Michal Drotován. Así pues, la vendimia tuvo lugar en la Casa Cultural Alemana, en las bodegas de bodegueros y viticultores, en la bodega municipal, en la casa de curiosidades de Kolonič y en el Salón del Vino Villa Vino Rača. El redactor Miroslav Wurfl asistió al evento y preguntó a los habitantes de Rača qué pensaban de la tradición vitivinícola de su pueblo.
¿Qué es lo que nos cuentan los viñedos? Pues, cuentan sobre la vida de nuestros antepasados, de nuestros padres, abuelos, tatarabuelos... cuentan sobre la manera de vivir en este lugar, cuentan que los viñedos representaban el objetivo y la herramienta de la vida. Cuentan sobre el trabajo pesado, duro, cotidiano...
Es evidente que ustedes, los habitantes de Rača, tienen realmente muchas ganas de continuar en la tradición vitícola del pueblo…
Continuar en la tradición significa expresar respeto hacia el trabajo en el viñedo, pero no solo eso, porque el trabajo en el viñedo incluía las relaciones sociales, relaciones familiares... hasta hoy en día es posible observar la diferencia entre la percepción del vino, de la uva y de los viñedos en las familias en las que se lo compran en el supermercado y en las que tienen que cultivárselo y producírselo. Es decir, en las que saben todo sobre el vino.
Ustedes aún son miembros de la generación que se recuerda del auge de estos viñedos, ¿verdad?
Creciendo y madurando, las relaciones de una persona cambian. Mientras que de niños odiábamos tener que ir a ayudar a nuestros padres trabajando en los viñedos, hoy con muchas ganas estamos desempolvando estas viejas tradiciones y de verdad, los resultados se pueden ver contemplando el paisaje de nuestro pueblo.
Sí, casi en todas las imágenes su pueblo se pueden ver los viñedos, Rača prácticamente está sumergida en ellos.
Nuestra relación hacia la viticultura es excelente. Un oriundo de Rača que creció rodeado por los viñedos no puede tener otra relación hacia el vino que excelente. Los viñedos forman parte de nuestro pueblo y espero mucho que a pesar de la situación actual de construcciones sobrevivan.
En el pasado la gestión de los viñedos funcionaba de manera diferente. Creo que la mayoría de ellos, la gestionaban las cooperativas agrarias, más que privados.
De niño no tuve una relación muy buena hacia los viñedos, dado que en lugar de entretenernos jugando tuvimos que trabajar allí. Puesto que nuestra casa estaba al lado de los viñedos, de mañana me despertaba el ruido de los tractores y de los helicópteros que asperjaban los pesticidas sobre los viñedos. Realmente, tengo que recordar que en el pasado se usaban en Rača los helicópteros para aplicar los pesticidas. En el sendero superior había un helipuerto donde los helicópteros bombeaban las sustancias o el agua, pero hay que decir que éramos unos señores si nos lo podíamos permitir. Estoy contento de que los habitantes de Rača sean conscientes de esta tradición y quieran seguir en ella. Saben que Rača está conectada a la viticultura para siempre y pasarán esta información a sus hijos y nietos. Me alegra ver que muchos de ellos invierten en la reconstrucción y salvación de los viejos viñedos.
Paradójicamente, a Rača se mudan familias jóvenes que compran las casas recién construidas en los terrenos de los viejos viñedos. Simplemente porque es lindo el pueblo. Así, tanto los oriundos locales como los nuevos habitantes, todos son hinchas del vino y apoyan la viticultura local.
Basta mirar detrás de las fronteras. Al igual que los vinateros austríacos están orgullosos de su vino, así lo están los de la región de Tokaj. Nosotros, los de Rača, también tenemos que estar orgullosos de nuestro vino Frankovka y de su larga tradición.
¿De qué manera se empeñan en pasar la tradición a las generaciones más jóvenes?
El respeto hacia la tradición radica en el hecho de que esta tradición tiene aquí centenares de años y no es cuestión de los últimos decenios. Los viñedos los formaron varias generaciones de las familias locales y durante varios centenares de años. Los viñedos dejaron sus huellas en nuestro ADN y por ello estamos obligados a entregar la tradición a nuestros hijos. Con este objetivo pusimos en marcha dos proyectos que se llaman Escuela del jardín el frutero y Escuela del viñedo. Gracias a estos proyectos ya disponemos de los viñedos plantados y atendidos por los alumnos.
En Rača se produce sobre todo vino tinto, y el históricamente más famoso se llama Frankovka.
Por supuesto, tanto el vino de Rača como el de la ruta del vino de los Pequeños Cárpatos tiene un buen renombre y una buena calidad. Sabemos que se producía ya desde hace siglos en cantidades relevantes. Lógicamente se exportaba a Polonia, Silesia, Moravia y en general, a todos los países vecinos.
Se dice que el Frankovka de Rača fue uno de los vinos predilectos de la emperatriz María Teresa…
Sí, se dice, pero no es cierto, puesto que no existe ningún documento que lo demuestre. En todo caso es muy probable, porque en la época de su gobierno el vino de Rača, el tinto Frankovka, vivía su auge, se producía en grandes cantidades y tenía una calidad suprema.
Rača_tradición vitivinícola
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